Nada como una parrilla de salida “bien mezclada” para tener una carrera espectacular y llena de adelantamientos. Y para conseguirla, por muchos “inventos reglamentarios” que se le ocurran a la FIA, a Bernie o a quien sea, no hay nada más efectivo que un chaparrón a mitad de los entrenamientos. Justo eso es lo que ocurrió en Suzuka el sábado y de ahí la realmente increíble configuración de la parrilla de salida del domingo, con pleno para los motoristas japoneses en primera fila (¡y con Toyota quitándole la pole a Honda en el circuito de casa!) y con los máximos favoritos a la victoria en las últimas filas, Alonso por delante de Raikkonen, eso si, luego de la enésima rotura de motor en el McLaren del finés.

El domingo la lluvia ya no hizo acto de presencia pero sus efectos ya habían sido suficientes como para cambiar por completo la fisonomía de la carrera y permitirnos asistir al mejor gran premio del año. Y es que por mucho que el señor Mosley nos quisiera convencer hace años de lo “excitante” de las tácticas de boxes, tipo “partida de ajedrez”, donde estén unos buenos adelantamientos “de verdad”, en la pista, ¡que se quiten todas las tácticas y estrategias del mundo!

La lluvia motivó una parrilla loca y una carrera superespectacular (foto BAR)

El duelo McLaren-Renault sigue en lo más alto, de nuevo ventaja para Renault (foto Renault)

Alonso se hinchó a adelantar, por dentro por fuera y por donde hiciese falta (foto Daimler-Chrysler)

Pole para Toyota ¡en casa de Honda!

Entre la lluvia que afectó a los últimos en salir a calificar el sábado y el deseo de las marcas japonesas de conseguir una superpublicitaria pole en Suzuka, no es de extrañar que la primera fila fuese copada por dos monoplazas con motores japoneses. La sorpresa fue que Toyota "le robase la cartera" a Honda en el circuito propiedad del motorista de los BAR, y pese a los esfuerzos de Button, el mejor crono del día era para un Ralph Schumacher que tenía su "minuto de gloria" de esta temporada.

McLaren y Renault muy superiores

El domingo, ya con suelo seco, la realidad se volvía a imponer. Ahora mismo nadie puede hacer sombra a los McLaren y los Renault. Mientras Ralph y Button arrancaban en cabeza y Sato y Barrichello se iban de excursión al sembrado en la primera curva, Alonso y Raikkonen empezaban a remontar desde sus muy retrasadas posiciones de salida, pasando a través del pelotón como cuchillo en mantequilla.

En poco más de una vuelta, Fernando ya estaba entre los diez mejores y Renault veía con satisfacción como Fisichella seguía sin problemas a los líderes y, sobre todo, como Montoya, con la inestimable colaboración de Villeneuve esta vez, acababa fuera de pista en la siempre conflictiva chicane "Senna-Prost" de final de vuelta. McLaren perdía uno de sus dos efectivos y la lucha por el título de marcas, verdadero leiv motiv de la carrera para los dos equipos que dominan el campeonato, daba un inesperado vuelco justo cuando McLaren ya se las prometía más felices una vez alcanzado el liderato de la tabla en Brasil.

Buena carrera de Webber aunque nada pudo hacer para contener a Alonso al final (foto BMW press)

El momento decisivo, Raikkonen "se come" a Fisichela al inicio del último giro (foto Daimler-Chrysler)

Kimi exhultante en el podio, ¡menudo carrerón hizo el finlandés! (foto McLaren press)

Festival de adelantamientos de Alonso

Con el título de pilotos ya asegurado en Brasil, el nuevo campeón tenía ganas de volver a ser agresivo en pista y olvidarse de la calculadora que ha venido utilizando en la segunda mitad de temporada. Y en Suzuka, Fernando tuvo ocasión de "darle gusto al gatillo" desde la salida. Tras pasar sin problemas a los Minardi, Jordan y compañía, el siguiente obstáculo era el Red Bull de Klien. Un primer intento en la chicane fue demasiado optimista y el Renault del ya campeón del mundo 2005 pasó pero "tomando un atajo". Alonso aplicó entonces la misma artimaña que usó Raikkonen contra él en Monza en situación similar y que tan poco le gustó entonces, dejó pasar al austriaco para evitar la penalización por sacar ventaja de su "salto de chicane", se pegó de inmediato a su rebufo y lo superó con facilidad a final de recta.

Con Klien superado era el turno, nada menos, que de Schumacher. Entre la superior competitividad del Renault y la poca carga de gasolina que llevaba, la diferencia con el Ferrari número 1 se derritió como nieve al sol. Pero justo cuando Alonso ya buscaba donde pasar llegó la orden desde boxes de dejar pasar a Klien debido a un mensaje de dirección de carrera que consideraba poco legal la maniobra anterior sobre el austriaco. Fernando obedecía de inmediato, levantaba el pie, se dejaba pasar por el austriaco y perdía unos 8 segundos en la operación ... justo para escuchar de nuevo por su radio que todo había sido un error de Charlie Witting y que la maniobra, aunque discutible, ¡era 100% legal! Vuelta a empezar entonces, nuevo adelantamiento a Klien, casi rutinario ya, y de nuevo a por Schummi. Las vueltas que siguieron fueron de las que hacen afición con el campeón entrnate acosando al saliente en un duelo lleno de simbolismos.

Estaba claro quien iba a salir ganando porque, hoy por hoy, un Renault calzado con Michelin es muy superior a un Ferrari-Bridgestone, por mucho Schumacher que lo pilote, pero el orgullo del heptacampeón alemán le hizo resistir hasta donde pudo y añadió aun más épica a la remontada de Alonso. Sobre todo cuando el asturiano decidió que ya no podía esperar más, sabedor de que Raikkonen venía por detrás "como un tiro" y se decidió a pasar al kaiser ¡en la 130R y por fuera! Fue uno de esos adelantamientos que quedan grabados en todas las retinas y en todas los vídeos de resumen de temporada, una pasada magistral en una de las curvas más difíciles del mundial, ¡una maniobra de auténtico campeón!

Raikkonen imparable

Pero la remontada de Alonso, con ser superespectacular, no iba a ser tan efectiva como la de Raikkonen. Su McLaren salía bastante más cargado de gasolina, así que cuando Alonso entro a repostar por primera vez, el finlandés todavía siguió en pista unas cuantas vueltas más, y lo mismo pasaría con el segundo reportaje. En esos dos intervalos Kimi rodó a un ritmo simplemente imposible para el resto, y aunque realizó menos adelantamientos de los que nos gusta ver, de los "reales", hizo bastantes más de esos otros que tanto se llevan hoy día, los "virtuales". Y cuando todos los coches de cabeza habían hecho sus respectivas dos paradas, Kimi ya era segundo mientras que Fernando estaba en la cuarta plaza, con el Williams de Webber entre ambos.

En cabeza estaba un Fisichella que había hecho lo previsto, superar al Toyota y al BAR que le precedían en parrilla y liderar la carrera. Pero "Fisico" sigue sin ser capaz de rodar, vuelta tras vuelta, al 100% de lo que su R25 puede ofrecer como hace su compañero de equipo. Y claro, rodando "rapidillo" pero sin lograr ir al máximo casi nunca, el romano se encontró con que, a diez vueltas de la llegada, su ventaja sobre el McLaren de un ya desencadenado Raikkonen no era como para estar tranquilo.

Mientras Alonso daba cuenta de Webber con otra pasada escalofriante, este en plena recta pero con dos ruedas por la hierba para superar el movimiento defensivo del australiano, Raikkonen se lanzaba a la caza de la primera posición y nos auguraba un final de carrera trepidante. A un ritmo de más de un segundo por vuelta, Kimi "se comía" al "Fisico" y estaba ya a su estela con poco más de una vuelta para la caída de la bandera a cuadros.

En Suzuka se puede pasar, más o menos con facilidad, a final de recta, y luego pocos más sitios hay que permitan un adelantamiento. Si acaso la entrada a la famosa chicane, pero ahí casi tienes que empujar para abrirte paso y la maniobra no suele acabar bien. El caso es que Fisichella, viendo cada vez mayor el McLaren en sus retrovisores, decidió que tal vez Kimi intentase el ataque en la chicane, anticipó su punto de frenada para tapar todos los huecos ...¡y cayó en la trampa! Raikkonen no hizo el más mínimo amago, aprovechó que su rival salía mucho más lento, se pegó a su estela y lo devoró a final de recta, entrando ya en la última vuelta. Una maniobra que demostró mucho del valor como piloto de uno y otro y que permitió al finlandés sumar su séptima victoria de la temporada, siendo ya el hombre con más triunfos este año ... aunque ello no le haya bastado para ser el campeón.

Renault vuelve a tomar ventaja

Pero el triunfo de Raikkonen no sirvió a McLaren para aumentar su ventaja en el mundial que queda por decidir, el de constructores. Los dos Renault de Fisichella y Alonso le acompañaron en el podio y permitieron al fabricante francés sumar cuatro puntos más que el inglés y recuperar, por sólo dos puntos, el liderato.

Queda sólo un gran premio, el próximo domingo en China, y McLaren puede quedarse sin "el otro título" también. Y es que además de correr más, hay que terminar las carreras y en eso, la escudería de Ron Dennis ha fallado demasiado este año.